Lengua árabe
   Cursos mensuales y continuos

MUNDO ARABE.ORG

     Curso "Islam y Mundo Árabe"

 


 

_____________________________________

El Romeo Palestino

Uri Avnery

 Traducción para Mundoarabe.org: 
Carlos Sanchís

   Arna Mer era una mujer tempestuosa y excitante. Era la hija de un profesor de medicina  el cual ya se había convertido en  una leyenda en vida. Como joven mujer se unió a los legendarios combatientes  del Palmach en el ejército clandestino, y desde entonces el Keffiyah  afectado por ellos se convirtió en su marca. Después de la guerra de 1948 se unió al Partido Comunista, entonces el grupo más odiado en Israel, y se casó con un funcionario del Partido Árabe. Sus dos bien conocidos  hijos, Juliano y Spartak, llevaron nombres revolucionarios.

   Al principio de la ocupación, Arna adoptó el campo de refugiados de  Jenin, un mar de miseria y privación, y creó una isla de luz: un teatro de niños. Con la ayuda de Juliano, entonces un joven actor ambicioso, reunió un grupo de muchachos y muchachas  de 9 y 10 años de edad, e improvisó actuaciones con los medios más rudimentarios. Hablando fluidamente el árabe, se identificó completamente con el sufrimiento palestino y animó a que los niños expresaran su enojo, orgullo y oposición a la ocupación. Por esta dedicación ganó el “el Premio Nobel Alternativo” en Estocolmo. En la víspera de su muerte a causa de un cáncer, agotada y frágil,  visitó el campo  para decir adiós.

    Semejante personalidad podría llenar una película completamente  por sí sola. Pero en la película “Los Niños de Arna”, dirigida  por Juliano, el “niño” es el protagonista junto  con la “ madre” y convierte la película en un  documento único e indispensable para cualquiera que quiera entender la Intifada palestina.

    Hace un año, la película de Muhammad Bakri “Jenin, Jenin” despertó una tormenta en Israel e incluso llegó al Tribunal Supremo (que tomó la decisión que prohibía su estreno). Ambas películas tratan  en parte el mismo territorio: los hechos de Jenin en abril del 2002, cuando el Ejército israelí invadió el pueblo de Cisjordania y el campo de refugiados como parte de  la llamada “Operación Escudo  Defensivo.” Ambos muestran  la profunda empatía para el bando palestino. Pero hay una  gran diferencia  entre los dos. En la película de Muhammad Bakri, se muestran las gentes  de Jenin como víctimas de una matanza. En la versión de Juliano Mer,  aparecen como héroes que asumen el poderío aplastante del Ejército israelí. Los combatientes palestinos en la película niegan airadamente la afirmación de que hubo una ”masacre “, una afirmación que  consideran humillante e insultante. Su actitud recuerda uno un poco a la de  los supervivientes de la revuelta judía del Gueto de Varsovia.

   Lo que hace de esta película  una experiencia inolvidable es la doble exposición de sus héroes. Juliano los filmó cuando eran niños, miembros del grupo de Arna. Son cautivadores muchachos y muchachas, llenos de espíritu y humor. Los vemos en toda su sinceridad,  chillando y  atacándose unos a otros en una actitud  de revalidad. Vemos a Ashraf, el muchacho más impresionante, soñando en un futuro cuando  será el “Romeo Palestino.” Observamos a estos niños, viviendo en condiciones infrahumanas, soñando con una vida de felicidad y esplendor.

    Cuando la película avanza,  los encontramos, ya hombres jóvenes, de nuevo. El sonriente y cautivador Ashraf, el Romeo Palestino, se inmoló en una misión  suicida. Como es usual en tales casos, sólo antes de la acción  grabó una última declaración en vídeo: un jovenzuelo barbudo, solemne, determinado, explicando que  esa muerte es mejor que la vida en el infierno de un campo de refugiados bajo la ocupación. Otros  cayeron–“caídos”,  no  “masacrados”–en la Batalla de Jenin.

    Los palestinos tratan a Juliano con perfecta confianza, a pesar de ser un “Yahudi” (realmente él es sólo medio judío, pero ante sus ojos es un judío). Como resultado se le dio una oportunidad que ningún otro israelí tendría en la vida: le permitieron acompañarlos  y fotografiarlos de día y de noche, hasta el fin. Así un  único e inestimable documento fue creado. Muestra cómo esos hombres que son descritos en los comunicados de  prensa del Ejército israelí como “hombres armados” y declarados para ser “ hijos de la muerte” (lo que significa:  susceptibles de ser asesinados) vivos o muertos.

    Les vemos moviéndose en grupos pequeños, provistos de armas ligeras, o durmiendo vestidos, preparados para saltar a la acción al primer  aviso. Se sientan juntos pasándose un cigarrillo, hablando en broma entre sí a veces, como los combatientes hacen antes de la batalla. Un espíritu de hermandad y compañerismo está en el aire. Son, después de  todo,  jóvenes llenos de vida que saben que sus días están contados. Ninguno de ellos es un religioso fanático.

     Cuando los puestos de  observación les alertan por teléfono celular que una unidad blindada israelí está acercándose, salen para atacarla, Kalashnikovs y pistolas contra poderosos tanques. Pero, como ellos dicen, están determinados a no rendirse, a luchar hasta el final (más bien en el espíritu de Sansón en la Biblia: “Permitidme morir con los Filisteos” [Jueces, 16, 30].)

   Esta es la  otra cara de los comunicados rutinarios del portavoz del ejército: “En el transcurso de una búsqueda de los terroristas en captura,  las  IDF entraron en el campo de refugiados…en el tiroteo resultante, cinco palestinos armados fueron muertos …nuestras fuerzas no sufrieron ninguna baja…”

   No es ningún secreto  que últimamente el ejército ha estado enviando columnas blindadas a los pueblos palestinos  no para “arrestar a  terroristas en búsqueda” o para “eliminar bombas de relojería”, sino para  sacar a estos combatientes armados de sus lugares de ocultación e  inducirlos a atacar a los tanques; una acción equivalente al suicidio.

  Al final, las fotografías de casi todos los niños de Arna– juntos de nuevo–aparecen en las paredes en carteles que recuerdan a los Mártires. Los niños que son al principio tan alegres y llenos de travesuras al principio de la película,  se habían convertido en  solemnes y amenazantes.

 A los ojos de la mayoría de los israelíes,  son simplemente los terroristas, asesinos y delincuentes cuyo solo objetivo en la vida es  ”derramar sangre judía.” No ven a los seres humanos y no se preguntan de donde vinieron y que fue  lo que consiguió que ellos hicieran lo que están haciendo. Por consiguiente,  no entienden la fuente de su fuerza y tenacidad.

A los ojos de los  palestinos, estos son sus héroes nacionales, personas jóvenes valientes y abnegados que sacrifican sus vidas por la dignidad y el futuro de su pueblo. Piensan de ellos como nosotros  pensamos de nuestros hombres clandestinos antes de que  Israel fuera creado.

    Ashraf, el que tenía que ser el Romeo palestino,  murió junto con sus amigos, como Romeo en la tragedia de Shakespeare. Pero viendo esta película, uno sabe que por cada uno que cae hay docenas para ocupar su lugar.

    Al abandonar el vestíbulo después de la proyección, una pregunta se estaba formulando en mi mente: al final, cuando los palestinos logren su independencia y estos combatientes se volverán parte de la mitología nacional, ¿serán las relaciones formadas en los tiempos más oscuros entre estos niños y Arna, y lo que ella quería lo que proveerá de  una base para  la conciliación?.

  Siempre es difícil  ver la otra cara de la moneda, aún más en  medio de luchas, cuando el dolor, la ira y el odio son la regla  suprema. Esta película nos presenta una oportunidad rara de conseguir un cuadro más lleno y más realista. Es una muy conmovedora película, una película que abre nuestros ojos y explica por qué el Ejército israelí no puede vencer estratégicamente a la Intifada  palestina, aunque la esté “ganando cada día”, como anunció el comandante de la Franja de Gaza  esta semana con orgullo ciego.

 

Curso
 Islam y Mundo Árabe

Presencial y a distancia

Inscripción online

 

 

Editor Ahmed Hijazi
Red Mundo Árabe . Plaza Callao, Nº 1 -
3º- 2, Madrid 28013, España
Teléfono:
915228922 - 637979217 E-mail: mundoarabe@mundoarabe.org
Copyright ©Mundo Árabe  2000-2007 Madrid-España

Resolución de pantalla recomendada 1024 x 768

 

   
 PUBLICIDAD    Tienda Online